jueves, 22 de mayo de 2008

22 DE MAYO... CABILDO ABIERTO...

"Mas allá del hambre, la miseria, y la opresión a que nos somete el sistema capitalista, tenemos sueños, ilusiones, alegrías y ganas de cantar, bailar, jugar, crear y por sobre todo luchar por un cambio social.
Reivindicar otros valores en contra de la estructura predominante, a favor de lo cooperativo, la participación activa, la libertad, la reflexión, la crítica a la vida cotidiana, recuperar nuestra historia, creando nuevas formas de pensar."

Sucedía en 1.810 según nuestros historiadores:
Martes 22
Ya desde temprano fueron llegando los "cabildantes". De los 450 invitados sólo concurrieron 251. También estaba presente una "barra" entusiasta. En la plaza French, Beruti y los infernales esperan las novedades. La cosa se fue calentando hasta que empezaron los discursos, que durarán unas cuatro horas, sobre si el virrey debía seguir en su cargo o no. Comenzó hablando el Obispo Lué diciendo que mientras hubiera un español en América, los americanos le deberían obediencia. Le salió al cruce Juan José Castelli contestándole que habiendo caducado el poder real, la soberanía debía volver al pueblo que podía formar juntas de gobierno tanto en España como en América. El Fiscal de la Audiencia, Manuel Villota señaló que para poder tomar cualquier determinación había que consultar al resto del virreinato. Villota trataba de ganar tiempo, confiando en que el interior sería favorable a la permanencia del virrey. Juan José Paso le dijo que no había tiempo que perder y que había que formar inmediatamente una junta de gobierno.

Casi todos aprobaban la destitución del virrey pero no se ponían de acuerdo en quien debía asumir el poder y por qué medios. Castelli propuso que fuera el pueblo a través del voto el que eligiese una junta de gobierno; mientras que el jefe de los Patricios, Cornelio Saavedra, era partidario de que el nuevo gobierno fuera organizado directamente por el Cabildo. El problema radicaba en que los miembros del Cabildo, muchos de ellos españoles, seguían apoyando al virrey.

"Modales"

El debate del 22 fue muy acalorado y despertó las pasiones de ambos bandos. El coronel Francisco Orduña, partidario del virrey, contará horrorizado que mientras hablaba fue tratado de loco por no participar de las ideas revolucionarias "... mientras que a los que no votaban contra el jefe (Cisneros), se les escupía, se les mofaba, se les insultaba y se les chiflaba."

1 comentario:

El Profe dijo...

Hola Colo, bueno es recordar historias, sobre todo la nuestra que fue tan manoseada. Tal vez algún día con una máquina del tiempo sepamos la verdad , mientras nos conformamos con lo que nos cuentan.

SAludos.